¿Alguna vez te has puesto a pensar en la valoración extrema que le adjudicamos al peso y tamaño de las personas?
El tema del peso y del tamaño del cuerpo son temáticas que están en la mesa cada día, es un tópico que puede asomarse en prácticamente toda plática con cualquier persona. Parece que es como el pronóstico climático, digo como el clima porque es un tema en común del cual siempre hay algo que decir al respecto. Dicho pronóstico considero que es perfecto abordarlo porque no está bajo el control de nadie, entonces si hablas sobre esto creo que las probabilidades de ofender a alguien son mínimas. En el caso de opinar sobre el peso o tamaño corporal de otra persona la posibilidad de que se sienta agredida es bastante alta. Creo que no solo yo lo sé sino todas y todos lo sabemos. Entonces por qué hablamos de ello ¿Como si a nadie le afectara?
“Pensamos que la apariencia de una persona es el reflejo de sus conductas diarias”
Asumimos que si una persona tiene un cuerpo gordo entonces tiene problemas emocionales o carece de la famosa “fuerza de voluntad” para lograr sus objetivos de peso corporal. Pero, ¿Y entonces cómo sabemos que esa persona no tiene una lucha constante con no poder bajar de peso?, ¿O cómo podemos conocer si esa persona está interesada en adelgazar? A veces ponemos a la pérdida de peso como el éxito máximo que una persona podría lograr.
¿SABES CÚANTOS FACTORES INFLUYEN EN EL PESO CORPORAL DE UNA PERSONA?
Entre ellos se encuentra su genética, complexión, preferencias, acceso a alimentos, presupuesto económico, estado emocional y psicológico, cuestiones hormonales, entre muchos otros. Además cabe mencionar que el hecho de que una persona sea delgada, no implica que esté gozando de una mejor salud que la de alguien que no lo sea. Símplemente no se puede determinar en qué condiciones de salubridad se encuentra una persona únicamente por su peso corporal. Los indicadores metabólicos (triglicéridos, colesterol, presión arterial, glucosa, etc.) no se ven a simple vista.
Como conclusión sobra decir que no podemos aplicar la frase “Es que debería de bajar de peso por su salud” porque no podemos saber nada con solamente ver a alguien más. Sin mencionar que el cuerpo de cada quién es asunto de cada quién y debemos respetarlo.
“Te invito a reflexionar por qué estamos glorificando la pérdida de peso y el cuerpo delgado, si al final, no es una viva imagen de tener salud.”
