En México se leen en promedio 3.8 libros al año por persona, pero sólo 2 de cada 10 lectores comprenden totalmente el contenido que leyó.
Cada vez es más frecuente ver a niños y niñas con la vista fija a las pantallas de los celulares y tabletas, situación que considero lamentable, puesto que es una de las desventajas de la tecnología es que ha desplazado el interés por la lectura, la emoción de abrir un libro y explorar mundos llenos de aventuras, personajes, colores y dar la oportunidad de desarrollar su capacidad de imaginación y creatividad.
Según cifras de la UNESCO, México es el penúltimo lugar en consumo de lectura de 108 países, en promedio el mexicano consume menos de tres libros al año.
Es por eso que en este artículo hago mención de lo importante que es fomentar el uso de la lectura desde edades tempranas. Existen libros adecuados para cada etapa de desarrollo, gustos y preferencias de cada pequeño.
Hacer de la lectura un momento especial en la rutina de los niños puede traer varios beneficios, como el vínculo que se fortalece entre papás e hijos, además de desarrollar la capacidad de lenguaje, de comunicación de imaginación y creatividad.
Los libros deben estar al alcance de los pequeños, como cualquier otro juguete y es responsabilidad del adulto enseñarles el respeto, cuidado y amor hacia ellos, recordemos que en las primeras etapas del desarrollo, los niños aprenden mayormente por imitación, si nuestros hijos nos ven leer y cuidar de éstos entonces ellos replicarán la conducta. Es por eso que integrar en la rutina diaria el ingrediente de la lectura hará un hábito eterno.
La magia de los libros
Son una herramienta eficaz para enseñar a los niños a manejar, identificar y entender situaciones que muchas veces son difíciles de explicar, por ejemplo la llegada de un hermanito, la pérdida de un ser querido, el divorcio, control de esfínteres, el inicio de la etapa escolar, etc.
Contar una historia similar a la que ellos están viviendo, permite que se identifiquen con los personajes y les tranquiliza saber que al personaje de un cuento le pase lo mismo que a ellos y ayuda entonces a comprender las situaciones y en automático bajan sus niveles de ansiedad.
Lugares especiales en la Ciudad para realizar lecturas infantiles
En la Ciudad de México, existen espacios que fomentan el uso de la lectura desde edades muy tempranas y me llena de gusto dejarles una lista de dos lugares que vale la pena visitar.
Uno de ellos se encuentra ubicado en la colonia Roma y se llama “Bunko” es una pequeña biblioteca comunitaria dirigida al público infantil que además ofrece diferentes actividades.
Y el segundo, IBBY, ubicado en Mixcoac, el cual ofrece actividades para niños y niñas de todas las edades utilizando el uso de los libros y fomento de la lectura como su eje rector.
Está demostrado que el uso de cuentos, historias, cantos, exploración con crayones, plumones, colores aporta significativamente a la lectoescritura.
Expongamos a nuestros niños al mágico mundo de los cuentos.
