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LOS AMANTES DEL CÍRCULO POLAR, ROMANCE Y MISTERIO

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3,2,1 Action!, Brain Fruit, Número 31

LOS AMANTES DEL CÍRCULO POLAR, ROMANCE Y MISTERIO

UN FILME PARA LOS QUE CREEN EN EL AMOR A PRIMERA VISTA

Los amantes del Círculo Polar’, del Director Julio Medem, con la que llegó al corazón de todos los Españoles y el público en general. Cuenta la historia de un amor totalmente diferente entre una pareja que no termina de encontrarse, rodada entre Madrid y Finlandia, y plagada de momentos afortunados. Un filme reconocido ampliamente por su gran reparto encabezado por Najwa Nimri y Fele Martínez, secundados por Maru Valdivielso, Nancho Novo y Perú hijo de Medem.

Considerada por muchos una película de culto del cine Español, es una fábula de amor visceral entre Ana y Otto dos nombres capicúas o palíndromos (se pueden leer de atrás para adelante y viceversa)  quienes desde niños se enamoran en el colegio, a la corta edad de 8 años. A partir de ese momento, la cinta entrelaza sus vidas con una propuesta diferente, para aquel entonces, llenos de cambios sorprendentes que mantiene al espectador atrapado entre la fantasía, el romance y el misterio. Medem manipula conscientemente los elementos de las historias de amor y con ello, el destino de sus personajes. La clave está en las miradas subjetivas: un amor visto a través de “Los ojos de Ana”, pero también a través de “Otto en los ojos de Ana”. A lo largo del tiempo una suerte de destino mantiene unidos a ambos chicos, que se reencuentran una y otra vez, y los lugares geográficos en que estos encuentros tienen lugar son justamente los que dan lugar a la película: la línea del círculo polar ártico, donde no se pone el sol nunca.

“MUESTRA CÓMO EL DESTINO MANTIENE UNIDOS A DOS CHICOS QUE SE REENCUENTRAN UNA Y OTRA VEZ, Y DE QUÉ FORMA LOS LUGARES GEOGRÁFICOS EN QUE SUCEDEN DAN SENTIDO A LA PELÍCULA: LA LÍNEA DEL CÍRCULO POLAR ÁRTICO, DONDE EL SOL NUNCA SE OCULTA”

El filme cuenta con un guión que radica en lo particular, con una construcción por capítulos desde dos miradas, con un montaje que en momentos parece extraño pero que se adecúa perfectamente a cómo se nos quiere contar la historia. Pese al tono dramático, a la ambientación, y a una muy  buena protagonista fotografía  a cargo de Gonzalo F. Berridi quien resalta colores fríos con un trasfondo muy cálido que crea una promesa de bonanza rodeada de amor eterno. Y eso, en su modo de fábula, está bien transmitido aquí. La música, de Alberto Iglesias, también tiene bastante importancia en la fuerza comunicativa de la obra.

También versa sobre el vacío que dejan las figuras paternas y maternas, sobre el efecto sanador del amor, sobre su complejidad, sobre las huidas hacia delante o sobre encontrar un lugar en el mundo en el que podamos sentirnos nosotros mismos. 

Las actuaciones están bastante bien en su gran mayoría, pero hay que resaltar el buen papel de Nacho Novo, y, especialmente, alabar la performance de Najwa Nimri, que se erige en bandera de la película, en la que es probablemente la mejor actuación como protagonista de su carrera.  

Esta película española dirigida por Medem ya es un clásico en el mundo de las películas románticas. Se estrenó en el año 1998, y recibió dos premios Goya (Mejor Montaje y Mejor Música Original) y dos premios Ondas (Mejor Película Española y Mejor Actriz), que la posicionaron dentro de los filmes españoles mejor conocidos.

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